Entre bocado y bocado de un almuerzo atípico (hoy era día de comer en familia por el cumpleaños de mi mami - a propósito un beso mamá-, pero el trabajo no lo permitió) me dediqué a leer un poco de las opiniones sobre la victoria de Donald (así, solo nombre, a lo amigo) y todas se pueden resumir en que Donald no ganó las elecciones, sino que Hillary estaba predestinada a perderlas.
Las causas son varias, la principal y la que al parecer fue la detonante de tan inesperado (?) resultado, fue que es la representante de una vieja política que solo a traído desgracias a la clase media de los estadounidenses.
A los bolivianos eso nos suena a deja-vu...
Un izquierdista como Micheal Moore (con él si van bien los nombres completos) sustentó la victoria de Donald ya por el mes de julio de este año y lo basó en 5 puntos que resumidos a una frase vendrían a ser:
1. El Brexit del medio oeste de Estados Unidos. Hay que salir del tratado de libre comercio que ha empobrecido a esa región (una región demócrata por autonomasia)
2. El último bastión de los hombres blancos enfadados. ¿Un país gobernado por un hombre de color (de por si ya el colmo) pasará el bastón de mando a una mujer? No!. El hombre blanco de mas de 35 golpea la mesa y sonríe con las frases misóginas, xonófobas y machistas de Trump, él es su hombre.
3. El problema de Hillary. Es impopular, nadie confia en ella
4. El voto deprimido a Bernie Sanders. Los seguidores de un candidato que eligen el mal menor votarán por Hillary pero no todos, los demás no votarán
5. El efecto Jesse Ventura. Fue un luchador profesional que se convirtió en gobernador nada mas porque el estado donde se postuló estaba harto de todo.
Tomé a Michael Moore como punta de lanza de este breve análisis porque claramente ejemplifica una historia conocida para nosotros los bolivianos hace 11 años.
El descontento de la masa electoral dijo adios a todos y le dimos la bienvenida a un Evo Morales que decía que lo nuestro es lo primero.
Y de pronto vemos que también se cuecen habas en el país mas estadístico del planeta y donde todas las encuestas nacieron muertas porque todas le daban la victoria a Hillary.
¿Quiere decir esto que la vieja política está muerta? ¿que hay que mirar para todos lados a ver si encontramos la salida a un nuevo paradigma de gobierno?, ¿que es hora de pensar a donde va el mundo?
o simplemente que la sociedad es visceral por excelencia o indiferente por convicción (que en este caso apoya a lo visceral por cohecho).
En mi humilde opinión considero que la sociedad ya no sabe como encontrar una nueva salida para los problemas que la desigualdad está creando.
Donald es la prueba clara que los estadounidenses despertaron del "sueño americano" hace mucho y que la realidad es demasiado cruel para ser vivida, asi que decidieron traer al vengador que saque a los que no son de aquí y que ponga en su lugar a los que solo deben obedecer (niños, mujeres y no blancos).
La globalización funcionaba en los ochenta, noventa y principios del 2000 porque servía a los intereses estadounidenses y mas que todo a la élite dueña de la economía.
Pero desde el 2008 ha dejado de funcionar para el común de la gente y los 400 mil millones de $us que tuvieron que pagar para que los banqueros sigan estafándoles los han vuelto mas nerviosos todavía (a propósito, aun no han devuelto ni un solo centavo de todo eso).
De pronto me doy cuenta que sigo contando la historia de un país tercermundista en un momento de la historia que dijo basta y buscó un cambio de rumbo, un paralelo a lo que se vió en las elecciones de ayer, lo que pueda pasar con el gigante del norte será otra historia.
Triunfó el chauvinismo de la gente relevada del poder que vio a un negro sentado en la silla mas poderosa del planeta y que ya era hora de ponerlos en el lugar que les corresponde a los arribistas.
Triunfó la indiferencia de las masas que no les importa el cambio de rumbo porque a ellos nunca les toca nada (el total de votantes no es ni de cerca a los dos tercios de la cantidad de población en edad de votar)
Triunfó el cansancio a vivir lo mismo en cuestión política y solo se votó por rebeldía: por él no debería votar, pero lo hago porque puedo.
Cuales son las ondas de choque que podemos esperar, de principio creo que las puertas del norte se han cerrado aun mas fuerte a cualquier iniciativa de los de afuera a beneficiarse del mercado estadounidense (llámense cualquiera).
El chauvinismo siempre se apoyó en la fuerza para hacer prevalecer su filosofía retrógrada, asi que veremos una nueva era dorada para la policía represora y el ejército invasor.
Trump tiene la marca del capitalista marcada en la frente: Soy el mejor, el mas fuerte, el único.
Hay que estar atentos hasta donde su inexperiencia en cuestión de estado y sus dotes de diva de los medios pueden torcer la historia.
Y hay que desconfiar aun mas de su perorata de que porque es multimillonario a el nadie lo puede comprar, mientras mas se tiene mas se quiere y ahora tiene la chequera firmada en blanco.
Las causas son varias, la principal y la que al parecer fue la detonante de tan inesperado (?) resultado, fue que es la representante de una vieja política que solo a traído desgracias a la clase media de los estadounidenses.
A los bolivianos eso nos suena a deja-vu...
Un izquierdista como Micheal Moore (con él si van bien los nombres completos) sustentó la victoria de Donald ya por el mes de julio de este año y lo basó en 5 puntos que resumidos a una frase vendrían a ser:
1. El Brexit del medio oeste de Estados Unidos. Hay que salir del tratado de libre comercio que ha empobrecido a esa región (una región demócrata por autonomasia)
2. El último bastión de los hombres blancos enfadados. ¿Un país gobernado por un hombre de color (de por si ya el colmo) pasará el bastón de mando a una mujer? No!. El hombre blanco de mas de 35 golpea la mesa y sonríe con las frases misóginas, xonófobas y machistas de Trump, él es su hombre.
3. El problema de Hillary. Es impopular, nadie confia en ella
4. El voto deprimido a Bernie Sanders. Los seguidores de un candidato que eligen el mal menor votarán por Hillary pero no todos, los demás no votarán
5. El efecto Jesse Ventura. Fue un luchador profesional que se convirtió en gobernador nada mas porque el estado donde se postuló estaba harto de todo.
Tomé a Michael Moore como punta de lanza de este breve análisis porque claramente ejemplifica una historia conocida para nosotros los bolivianos hace 11 años.
El descontento de la masa electoral dijo adios a todos y le dimos la bienvenida a un Evo Morales que decía que lo nuestro es lo primero.
Y de pronto vemos que también se cuecen habas en el país mas estadístico del planeta y donde todas las encuestas nacieron muertas porque todas le daban la victoria a Hillary.
¿Quiere decir esto que la vieja política está muerta? ¿que hay que mirar para todos lados a ver si encontramos la salida a un nuevo paradigma de gobierno?, ¿que es hora de pensar a donde va el mundo?
o simplemente que la sociedad es visceral por excelencia o indiferente por convicción (que en este caso apoya a lo visceral por cohecho).
En mi humilde opinión considero que la sociedad ya no sabe como encontrar una nueva salida para los problemas que la desigualdad está creando.
Donald es la prueba clara que los estadounidenses despertaron del "sueño americano" hace mucho y que la realidad es demasiado cruel para ser vivida, asi que decidieron traer al vengador que saque a los que no son de aquí y que ponga en su lugar a los que solo deben obedecer (niños, mujeres y no blancos).
La globalización funcionaba en los ochenta, noventa y principios del 2000 porque servía a los intereses estadounidenses y mas que todo a la élite dueña de la economía.
Pero desde el 2008 ha dejado de funcionar para el común de la gente y los 400 mil millones de $us que tuvieron que pagar para que los banqueros sigan estafándoles los han vuelto mas nerviosos todavía (a propósito, aun no han devuelto ni un solo centavo de todo eso).
De pronto me doy cuenta que sigo contando la historia de un país tercermundista en un momento de la historia que dijo basta y buscó un cambio de rumbo, un paralelo a lo que se vió en las elecciones de ayer, lo que pueda pasar con el gigante del norte será otra historia.
Triunfó el chauvinismo de la gente relevada del poder que vio a un negro sentado en la silla mas poderosa del planeta y que ya era hora de ponerlos en el lugar que les corresponde a los arribistas.
Triunfó la indiferencia de las masas que no les importa el cambio de rumbo porque a ellos nunca les toca nada (el total de votantes no es ni de cerca a los dos tercios de la cantidad de población en edad de votar)
Triunfó el cansancio a vivir lo mismo en cuestión política y solo se votó por rebeldía: por él no debería votar, pero lo hago porque puedo.
Cuales son las ondas de choque que podemos esperar, de principio creo que las puertas del norte se han cerrado aun mas fuerte a cualquier iniciativa de los de afuera a beneficiarse del mercado estadounidense (llámense cualquiera).
El chauvinismo siempre se apoyó en la fuerza para hacer prevalecer su filosofía retrógrada, asi que veremos una nueva era dorada para la policía represora y el ejército invasor.
Trump tiene la marca del capitalista marcada en la frente: Soy el mejor, el mas fuerte, el único.
Hay que estar atentos hasta donde su inexperiencia en cuestión de estado y sus dotes de diva de los medios pueden torcer la historia.
Y hay que desconfiar aun mas de su perorata de que porque es multimillonario a el nadie lo puede comprar, mientras mas se tiene mas se quiere y ahora tiene la chequera firmada en blanco.
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